El término facet describe una superficie especial que crea efectos luminosos especiales en joyería, sobre todo en piedras preciosas, debido a su forma característica. Facet procede del francés y significa "pequeña superficie de diamante". En latín, facies significa "lado" o "frente". Las facetas son las pequeñas superficies de las piedras talladas de tal manera que la luz se refracta en ellas de un modo especial, creando efectos únicos. El brillo de una piedra preciosa se debe siempre a sus facetas y a la refracción de la luz asociada. Las facetas de una piedra preciosa se crean durante el proceso de tallado, actividad a la que posteriormente se debe en parte el valor de la piedra. Si una piedra preciosa no se talla redonda o lisa, durante el proceso de tallado se le dota de lados angulosos, las facetas, que refractan la luz de muchas formas distintas y confieren a cada piedra preciosa su carácter especial, su fuego. Las superficies pulidas y lisas de las facetas se conocen en la elaboración de piedras preciosas desde el siglo XV, y hoy en día se utilizan diferentes cortes de facetas para distintas piedras en joyería: talla brillante, talla rosa, talla oval, penduloque, talla escalera, talla esmeralda y talla tijera.
